I Antecedentes
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), recibió el día martes 13 de mayo a familiares de privados de libertad que se encuentran detenidos en las celdas preventivas de la Policía de Masaya preocupados por el Estado de salud de sus familiares, en vista que la madrugada del día lunes 12 murió un privado de libertad presuntamente de leptospirosis en el Hospital Dr. Humberto Alvarado, quien había sido trasladado al centro asistencial el día anterior.
Por esta razón, un equipo del CENIDH se trasladó al mediodía del martes a la estación policial de la ciudad de Masaya para verificar la situación y entrevistarse con las autoridades pertinentes.
II Entrevista con el Comisionado Leandro Lara
La estación policial de Masaya está a cargo del Comisionado Mayor Horacio Sobalvarro, sin embargo al momento de la visita, dicho comisionado no se encontraba en la estación policial, razón por la cual el equipo del CENIDH fue atendido por el Segundo Jefe, Comisionado Leandro Lara.
El Comisionado Lara informó que en las celdas preventivas de la Policía de Masaya se encontraban en las celdas un total de 148 privados de libertad. De ese total, 112 estaban condenados, 33 personas están siendo procesadas y solamente 3 se encuentran en proceso investigativo.
De igual manera, destacó el Comisionado Lara que del universo de privados de libertad, existían quince mujeres y solamente seis adolescentes. Confirmó que efectivamente, en horas de la madrugada del lunes había fallecido JSGP de 30 años de edad en el Hospital Dr Humberto Alvarado de Masaya. De igual manera, informó que el día viernes, el ahora occiso JSGP había sido trasladado al hospital de Masaya por presentar fiebre, pero no fue internado y regresó a la estación policial, sin embargo, el día domingo no había mejorado por lo que fue trasladado nuevamente al hospital.
Según el mando policial, el joven cumplía condena de cuatro años y síes meses por tráfico interno de drogas y estaba en la estación policial desde septiembre del 2013. Posteriormente, el Comisionado Lara autorizó el acceso a las celdas preventivas de la estación policial.
III Inspección a las celdas preventivas
El equipo del CENIDH ingresó a las celdas preventivas de la Policía de Masaya en compañía del Capitán Ervin Bonilla, oficial a cargo del área de Control de Detenidos. El Capitán Bonilla confirmó que las celdas preventivas tienen una capacidad de 32 detenidos en siete celdas, pero que en la actualidad tienen a 148 personas. Cabe destacar que la infraestructura de las celdas fue remodelada recientemente gracias a la cooperación internacional.
En cuanto a la situación de los menores privados de libertad, manifestó que cinco se encontraban en la celda 1 con reos de menor peligrosidad, pero que todos estaban siendo procesados. El sexto menor de edad, de 17 años se encontraba en una oficina, en el acceso al área de celdas, ya estaba siendo procesado por violación y al estar con otros privados de libertad su integridad corría riesgo por la práctica en los centros de detención de violar a los privados de libertad acusados de violación.
El equipo del CENIDH tuvo oportunidad de entrevistar a varios detenidos, uno de ellos en la celda 5 manifestó que padecía de diabetes, que ha recibido asistencia médica y que gracias a su familia recibe el medicamento para tratar su enfermedad. Sin embargo, en esa misma celda, había un interno que tenía erupciones cutáneas, que había recibido asistencia médica pero no estaba tomando ningún medicamento.
Se logró verificar que al momento de la visita, todas las celdas contaban con agua potable y un servicio higiénico para que los privados de libertad realizaran sus necesidades. En el caso de los menores de edad, el CENIDH verificó que se encontraban con unos diez reos adultos condenados o procesados por delitos menos graves. De igual manera, como consecuencia del hacinamiento, los condenados y los procesados comparten celdas, al igual que los menores comparten celdas con adultos.
En la celda de Mujeres se encontraba una interna con tres meses de embarazo quien aseguró no había recibido control prenatal.
Para la totalidad de las celdas, hay unos cuatro televisores, el botiquín se encuentra vacío y no se observó que exista extintor contra incendio. El Capitán Bonilla, refirió que a cada celda se le permite el uso de un equipo celular para que los reos estén en comunicación con sus familiares.
De igual manera, el Capitán Bonilla refirió que el pasillo donde normalmente recibían sol los privados de libertad, requirió ser acondicionado como una celda más para hacer frente al hacinamiento, situación que fue constatada por el equipo del CENIDH. Cabe destacar que al momento de la inspección, tres privados de libertad habían sido trasladados al hospital por presentar fiebre.
De la inspección realizada, el equipo del CENIDH recomendó al Comisionado Lara, que si bien es cierto la policía tiene como práctica que al sentirse mal un privado de libertad, se requiere la asistencia de los Bomberos o Cruz Roja y son ellos quienes determinan si amerita o no traslado, es necesario establecer alguna coordinación con el Hospital o el SILAIS para que una vez por semana o cada quince días, los médicos visiten a los privados de libertad como medida preventiva para garantizar el derecho a la salud.
En idéntico sentido, se le recomendó al Comisionado Lara la necesidad que la privada de libertad lleve un control prenatal.
IV entrevista con el Dr. Enrique Picado, Director del Hospital de Masaya
Terminada la visita en la Policía, el equipo del CENIDH se trasladó al Hospital Dr. Humberto Alvarado donde se solicitó entrevista con el Director Dr. Enrique Picado.
En la entrevista con el Dr. Enrique Picado manifestó al equipo del CENIDH que aún se desconoce la causa de la muerte del detenido. Agregó que todo paciente febril tiene un protocolo de atención para descartar dengue, malaria o leptospirosis. Asimismo, manifestó que al momento del deceso se le hicieron los exámenes respectivos y que esos se encuentran en un laboratorio en Managua. Sin embargo, a pesar que él desconoce los resultados de los exámenes, dijo que es posible descartar cualquiera dengue, malaria o leptospirosis como causa de muerte, ya que al detectarse un caso, por protocolo en MINSA manda a fumigar de forma inmediata 100 metros a la redonda y eso no ha ocurrido.
El equipo del CENIDH le preguntó al Dr. Picado la razón por la cuál se le dio de alta al privado de libertad, si esto se debió a razones médicas o al hecho de la imposibilidad de los agentes policiales de permanecer en el centro asistencial custodiando al privado de libertad. A la pregunta, el Dr. Picado respondió que se está realizando una auditoria médica, pero, que es frecuente que los agentes policiales se lleven a los privados de libertad por la imposibilidad de custodiarlos en el hospital.
Por último, refirió el Dr. Picado que el cuerpo del privado de libertad fue entregado al Instituto de Medicina Legal, quienes en última instancia, determinaran la causa de la muerte del joven JSGP.
El equipo del CENIDH trató de entrevistarse con Silvio Navarro, Director del SILAIS en Masaya, para conocer sobre el caso, pero no fue posible.
V Conclusiones y Recomendaciones
En su visita, el equipo del CENIDH pudo verificar el excesivo hacinamiento existente en las celdas preventivas de la Policía de Masaya y que éste es consecuencia de la imposibilidad del Sistema Penitenciario de Granada de recibir más privados de libertad según informó el Comisionado Lara.
El hacinamiento repercute en los derechos de las personas privadas de libertad, ya que: no pueden recibir visitas conyugales; no pueden aplicar a beneficios de reducción de pena por trabajo o actividades formativas como continuidad de estudios; los familiares deben llevar diariamente la comida a los privados de libertad ya que la Policía no cuenta con presupuesto de alimentación para ellos: la atención médica se restringe a situaciones de emergencia, lo que amenaza su integridad física; y existe riesgo de amotinamiento que desborda la capacidad de los agentes policiales y hace necesaria la presencia de tropas especiales para restablecer el orden, lo que configura una amenaza a la integridad física de los privados de libertad sin que éstos tengan capacitación adecuada para tratarlos.
El hacinamiento en las celdas preventivas de la Policía Nacional obstaculiza la transformación y reeducación de las personas privadas de libertad.
Por lo expuesto el CENIDH recomienda:
1. La ampliación y el mejoramiento de los centros penitenciarios a fin de que las personas procesadas y las que han recibido condena sean trasladadas y no se continúe utilizando celdas policiales.
2. Se cumpla con el apartado XIX de los Principios y Buenas Prácticas sobre la Protección de las Personas Privadas de libertad en las Américas, el cual establece la separación por categoría entre procesados y condenados, así como adolescentes.
3. Que el hacinamiento en las celdas preventivas de la Policía Nacional sea reducido en el menor tiempo posible, para que los privados de libertad condenados y procesados se encuentren recluidos en condiciones más adecuadas.
4. Que la Policía Nacional realice una investigación oportuna e imparcial para esclarecer las circunstancias del deceso de JSGP, que se determinen las responsabilidades y se apliquen las sanciones correspondientes, si las hubiera. Asimismo, informe sobre los resultados de la investigación y aplicación de las sanciones los familiares del occiso.
5. Es necesario que las autoridades del Ministerio de Salud publiquen los resultados de los exámenes realizados al ahora occiso JSGP, a fin de descartar la existencia de focos de infección, tomar las medidas pertinentes y aclarar la situación a los privados de libertad y sus familiares.
6. Se establezcan relaciones de coordinación con las autoridades de salud, a fin de brindar atención médica de forma preventiva y oportuna a los privados de libertad, en vista que el protocolo de atención médica de emergencia implementado por la Policía no permite la detección oportuna de enfermedades o padecimientos que amenazan la vida de los privados de libertad.
7. Debido a que el cuido de las personas privadas de libertad recae sobre el Estado, es importante brindar atención especializada a pacientes crónicos y mujeres en estado de gravidez para garantizar el derecho a la salud e integridad física de estas personas.
Managua, miércoles 14 de mayo de 2014