La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), otorgó Medidas cautelares a favor de Carlos Bonilla y la Sra. Gabriela García, las cuales fueron solicitadas por el CENIDH, después del atentado que sufrieran ambos el pasado 26 de febrero.

En conferencia de prensa el Director del Jurídico del CENIDH, Dr. Gonzalo Carrión, anunció que la CIDH envió al Canciller de la república, Samuel Santos, la notificación de las medida cautelar 121 16, otorgadas con carácter excepcional por la gravedad de los hechos que sufrieron Bonilla y García, los cuales reúnen los requisitos de urgencia gravedad y de irreparabilidad.

Según  el defensor, la CIDH ha valorado y solicitado al Estado de Nicaragua, la aplicación de las medidas cautelares,  por considerar que la vida de ellos corre peligro y para evitar un daño mayor la CIDH otorga las medidas cautelares.

Carrión, dijo que el Estado de Nicaragua tiene 15 días una vez recibida esta notificación, deberá informar a la CIDH sobre la adopción de las medidas  acordadas con sus beneficiarios y sus representantes.

El activista Carlos Bonilla, expresó su inconformidad porque aún no se ha dado ningún reporte de la agresión, ni de las dos personas capturadas por los vecinos. Han pasado 40 días desde el día en que se violentaron sus derechos y pareciera que no ha sucedido nada.

Bonilla, dijo haber escuchado a sus agresores decir “matalo” y asegura que ese, era en realidad su objetivo, ya que no le robaron nada, solo se llevaron documentos de una encuesta en la que le preguntaban a la población que es lo que piensa del Poder Electoral. De igual manera manifestó que teme por su vida y la de su esposa.

Para Carlos Bonilla el otorgamiento de las medidas cautelares, evidencia que  los derechos humanos son  violentados y que  hay casos de personas asesinadas en los cuales no se esclarecen los hechos. También expresa  que “lo peor es que están dividiendo a los ciudadanos nicaragüenses, los afines al gobierno y los otros somos los que cuestionamos y decimos no estamos de acuerdo con lo que se está haciendo, no se está actuando de manera justa, nuestro país no puede seguir así. La Policía Nacional es una institución para salvaguardar a todos los nicaragüenses, tenemos que exigir nuestros derechos”.

Por su parte Gabriela García, quien también fue agredida,  espera que se cumpla con las medidas cautelares y reclama sus derechos, como cualquier ciudadano, independientemente de la ideología política y le pide al gobierno que aplique correctamente las leyes nacionales e internacionales.

García, tampoco cree que sea justo que se use la violencia como un arma para callarla y añade que no quiere ser violentada por defender los derechos de los ciudadanos. Además, se siente indignada por posición del gobierno al defender solamente sus intereses y no los de todos como ciudadanos.

“Espero que el gobierno de Nicaragua acate estas órdenes internacionales” finalizó García.