Representantes y socios de Pequeñas Centrales Hidroeléctricas (PCH) del centro y  norte del país, denunciaron que funcionarios de la Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica  (ENATREL) están presionándolos para que cedan la administración de las PCH por un periodo de 20 años. Los denunciantes consideran que estas acciones son para despojarlos de estas pequeñas generadoras de energía, que en el 2004,  fue una iniciativa del gobierno de turno y la cooperación internacional con el objetivo de llevar energía eléctrica a lugares recónditos y beneficiar a sus pobladores, como parte de la reducción de la pobreza y los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).
Rommel Loaisiga, Representante de la PCH “Las Nubes”, el Naranjo, en Waslala, recordó que en el 2002, les expusieron este proyecto en los diferentes lugares donde están ubicadas las siete  hidroeléctricas. En ese momento les presentaron diferentes modelos jurídicos con los cuales se podían constituir, ellos optaron por sociedades anónimas de organización local y que la administración sería asumida por las comunidades.
Actualmente las PCH, generan 5 megavatios y  brinda  servicio eléctrico a unas 8,500 familias, de estas, un 54%  son socios, de las cuales el 35 % son mujeres  que participan activamente en los proyectos  como dueñas.  Según los representantes de las PCH, también han creado empleos,  ha disminuido la migración del campo a la ciudad y hasta la fecha han cumplido con la expectativa inicial que era llevar la energía a comunidades aisladas donde no estaba el sistema interconectado nacional.
Según los denunciantes, los funcionarios de ENATREL, pretenden que les firmen unos convenios donde  ceden la  administración de las PCH a esta institución por un periodo de 20 años; lo cual consideran alarmante porque en la práctica esto significa que los están despojando de los proyectos y de las inversiones que ellos han realizado.
Por otro lado, el Estado ha incumplido en  conectar a las PCH al sistema de interconectado nacional y así poder comercializar  el excedente de energía que son 4 megavatios que producen pero que hasta la fecha no han logrado vender, lo cual constituye otra  forma de presión para quebrarlos económicamente.
Recordaron que en  la Primera fase del proyecto trabajaron bien; señalaron que entre los compromisos asumidos por el Estado de Nicaragua era garantizar la asistencia técnica, crear capacidad local, capacitar a los ingenieros operadores, los sistemas administrativos de cada una de las PCH, pero desde el 2011 suspendieron la ejecución de los compromisos  para obstaculizar el servicio de la PCH.
Tal es el caso de la PCH,  El Naranjo que tuvo un desperfecto que supuestamente los técnicos de ENATREL era la tarjeta electrónica o unos para rayos los que se habían dañado, se llevaron la tarjeta y pasaron 19 días sin energía. El problema  era un  interruptor y  lo resolvieron los administradores de esta PCH en cuatro días con la asistencia de técnicos independientes. ENATREL lo que hizo fue azuzar a la comunidad y crear problemas.

Por su parte, Roger Araica manifestó que como directivo de PCH demanda al Estado de Nicaragua que cumpla y respete el convenio firmado, que cesen las visitas de los empleados de ENATREL que tienen como objetivo descalificar la efectividad de los proyectos,  para concluir que no son sostenibles. Araica enfatizó que el Estado debe cumplir con interconectar las pequeñas centrales hidroeléctricas a la red nacional para que estas puedan tener mayor rentabilidad.
El Director Jurídico del CENIDH, Dr. Gonzalo Carrión dijo que la denuncia planteadas por los representantes de las PCH es un abuso de poder, ya que evidentemente se trata de un despojo, lo cual es parte de una estrategia de concentración de negocios, violentando el convenio firmado por la comunidad en el 2004, que establece estos proyectos son para beneficiar a la comunidad en base a su participación activa.
En definitiva, se trata de despojarlos de sus derechos, para lo cual han promovido, desde el Estado todo tipo de obstáculos que impidan el desarrollo de los objetivos suscritos en el Convenio. El CENIDH exhorta a la cooperación para que se pronuncie en defensa de lo conveniado.