Managua, 3 de marzo de 2016

Excelentísima
Señora
Diana Valladares
Embajadora de la República de Honduras
en Nicaragua
Su Despacho

Estimada Señora Valladares:

Con profundo dolor e indignación hemos conocido hoy la noticia del cobarde asesinato de la Señora Berta Cáceres, miembro del pueblo lenca, Coordinadora del Consejo de Pueblos Indígenas de Honduras (COPINH),  defensora de derechos del ambiente en ese país y madre de cuatro hijos.

Berta fue asesinada, según información recibida la mañana de hoy, por dos hombres que irrumpieron en su vivienda localizada en la Colonia “El Líbano” en La Esperanza, Intibucá, el día de hoy, alrededor de la una de la madrugada para privar de la vida a quien se valió solamente de la palabra a fin de incidir en que proyectos hidroeléctricos que causarían daños en el medio ambiente no se realizaran.

Lamentamos que Berta haya sido asesinada, aun cuando tenía medidas cautelares aprobadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Teniendo en cuenta la vigencia de dichas medidas, hacemos un llamado al Gobierno de Honduras para que concerte las medidas otorgadas por la CIDH para otros defensores y defensoras de derechos humanos y emprenda todas las acciones necesarias para que las mismas sean una garantía efectiva para la protección de la vida e integridad física de quienes corren similar riesgo que el que puso fin a la vida de Berta.

Como defensores y defensoras de derechos humanos nos dirigimos a usted para urgir al gobierno que dignamente representa, se realice una investigación imparcial, exhaustiva e inmediata tendiente a determinar las responsabilidades penales y civiles correspondientes en el caso y se apliquen las sanciones que en derecho corresponden. La impunidad, además de revictimizar a los familiares de las víctimas alienta otros hechos de violencia hacia defensores y defensoras.

La labor y el compromiso de Berta con la defensa de los derechos ambientales, la cual mereció que en abril de 2015 le entregaran el premio Goldman, máximo reconocimiento mundial para activistas del medio ambiente,  ha inspirado y continuará motivando a defensores y defensoras de derechos humanos alrededor del mundo a seguir dedicando nuestros mejores esfuerzos para luchar contra la impunidad, la corrupción  y la depredación de los recursos naturales en aras de alcanzar el desarrollo con equidad.

Agradeciendo de antemano su atención a la presente, aprovechamos la oportunidad para expresarle las muestras de nuestra más alta consideración y estima,

Atentamente,



Vilma Núñez de Escorcia                Mauro Ampié Vílchez
Presidenta                            Director Ejecutivo


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