“Desde el 2007 cuando el Presidente Ortega asume el poder otra vez, inicia un proceso en el que los periodistas se ven afectados por amenazas, restricciones y represalias al momento de ejercer su labor”, dijo el Director Ejecutivo del CENIDH, Dr. Mauro Ampié. El CENIDH preocupado por el deterioro de la libertad de expresión y de prensa en Nicaragua, realizo un Foro sobre este tema con una perspectiva de derechos humanos y con enfoque de género, en este evento participaron periodistas provenientes del Caribe nicaragüense, Masaya, Granada, León, Managua.
Foros similares fueron desarrollados en Esteli, Matagalpa y Juigalpa como parte de las actividades del Proyecto Actores de Cambio que cuenta con el apoyo de Hivos - Asdi.
En este Foro, el Director Ejecutivo del CENIDH, dijo que “el Estado que no cumple e irrespeta la ley de acceso a la información, recordó el proceso de concentración de medios de comunicación que tiende a imponer el criterio oficial un proceso que empobrece el debate público y limita las posibilidades de que la ciudadanía acceda a dichos medios, deteriorando el estado de este derecho que es fundamental para la construcción de ciudadanía y el fortalecimiento de la democracia”.
El CENIDH ha documentado situaciones de violencia a los periodistas, quienes han sufrido agresiones e intimidación, por ello “vemos con preocupación que el gobierno niega en el Examen Periódico Universal y la Comisión Interamericana, cuando asisten a las audiencias, haber recibido denuncias donde se alegan violaciones al derecho a la libertad de expresión; pese a que fueron presentadas ante las autoridades pertinentes sin recibir la merecida investigación y sanción, expresó el Director Ejecutivo.
Se refirió a la intención deliberada de agredir e intimidar a los periodistas por la fuerza policial y fuerzas para estatales cuando se trata de cubrir las noticias, pues se busca impedir que la ciudadanía conozca por la vía de las imágenes el abuso policial. Cuando un periodista da cobertura a ciertos eventos la policía busca evitar que las y los comunicadores estas personas ejerzan su labor.
En el Examen Periódico Universal, 21 recomendaciones están dirigidas a la libertad de expresión, entre estas investigar y sancionar las agresiones contra periodistas, impedir que hechos de intimidación sigan presentándose, mejorar las condiciones de acceso a la información, impedir que continúe el proceso de concentración de los medios y garantizar la pluralidad de los medios; estas recomendaciones deben ser implementadas por el gobierno, pero solo se comprometieron a cumplir 17 recomendaciones, por lo tanto corresponde a periodistas, defensores de derechos humanos y a la sociedad en su conjunto hacer que el gobierno cumpla, concluyó Ampié.
En el Foro participó como expositora la Directora de Onda Local, la periodista, Patricia Orozco, quien compartió los resultados de una encuesta realizada por la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) en toda la región centroamericana, sobre el tema de libertad de expresión. En el caso de Nicaragua denominaron a la investigación “La Relativa Calma”, porque se dice que en el país no hay muertos, ni muertas por ejercer el oficio periodístico, que hay buenas condiciones. Luego, las y los periodistas platearon situaciones que viven en su quehacer.
Delsy Antonio, de Radio Miskut y quien conduce un programa de opinión en el Caribe Norte, expresó que experimenta retos no sólo como periodista, sino como mujer, en su lugar de residencia. “Me siento siempre amenazada al punto de no poder caminar sola en la calle. Temo que otras personas, que pertenezcan a partidos políticos distintos al mío, tomen represalias por lo que digo en mi programa”, indicó quien se identifica como simpatizante del partido Yatama.
Jessica Tenorio, miembro de la directiva del Colegio de Periodistas de Granada y quien fue amenazada de robo y violación a mediados de 2012, dijo que la división existente entre periodistas afines al gobierno y los reporteros independientes también alimenta la estrategia del gobierno de turno. “Fui acosada por funcionarios de la Policía Nacional, pero sólo tres de mis colegas me apoyaron en denunciar el caso en sus programas o diarios. Esta división nos está afectando”, manifestó.
Lenguaje y discriminación hacia las mujeres
Orozco también abordó el sexismo y androsexismo en los medios de comunicación, sobre el hecho de expresarnos solo desde la perspectiva de los hombres y creer que cuando hablamos de los hombres, estamos hablando de la sociedad y eso invisibiliza a las mujeres ya que cada vez más aparecemos en el espacio público, defendiendo derechos, haciendo propuestas, aparecemos de diferentes formas y esto hay que visibilizarlo en toda su dimensión, porque es el aporte de las mujeres.
La directora de Onda Local, expuso que “una de las formas más sutiles de transmitir la discriminación de las mujeres es el lenguaje, sin embargo es a través de esta que se da la transmisión de valores de pensamiento de la sociedad, nada de lo que decimos es neutro todo tiene una lectura de género”. Desde los medios podemos cambiar esta realidad. Orozco invitó a construir agendas donde se incluya a mujeres que están opinando sobre política, economía, empresarias, como defensoras de derechos humanos.